En épocas de posmodernidad

"Ella se le acercó al oído y le dijo que era justo lo que siempre había soñado, sin embargo quería una relación abierta dónde solo ella lo buscaría para verse de vez en cuando, él lo aceptó".

Hoy se liga tan diferente a como cuando éramos jóvenes, aquellos que hacían llamadas a la casa deseando que fuera esa persona la que contestara y no su madre. 

Hoy no sabes si decir que "si" o "no" está bien, si ir o no ir a la cama te asegura el seguirlo viendo a esa persona. 

"El la llama a cada rato, nunca se han visto, si embargo él no quita el dedo del renglón con llegar a su departamento o que ella vaya solo a platicar". 
Son instantes en la vida en los que te cuestionas si es correcto meter a alguien que no conoces a tu casa o tu ir a la de él a "platicar", sabiendo que es lo mínimo que puede pasar. 

En esta época sabes que todos quieren sexo, te incluyes en esa estadística, pero también entiendes que no se puede estar más vacío que como te encuentras ahora. 

Salidas por café, besos, ir por una cena, buena plática, etc. Solo queda como algo que viviste pero que no se repetirá con el mismo. 

En esta modernidad donde a muchos no nos gusta el rol, más que el acercarnos entre la gente por medio de apps,  nos estamos alejando a tener una vida solitaria por no querer que nos hagan más daño del que ya hemos pasado por estar apostando por las personas equivocadas.