Te digo adiós, me amo más a mi

Con una carta que jamás recibirás y con palabras que nunca escucharás, sin embargo para mi ha sido muy importante tu paso por mi vida pero también dejarte ir por completo. 

Nunca olvidaré el 30 de agosto cuando llegaste a mi vida, no olvidaré como comenzó todo, a casi un año me he sentido amada, deseada, comprendida, con atención y reciprocidad; sin embargo los momentos oscuros de semanas de ausencia, las dudas de saber si realmente te importaba y toda la inestabilidad mental que traes contigo hacia mi es lo que detona que te diga adiós. 

Se que hay cosas que no se pueden cambiar sobre todo el como la gente actué hacia uno, considero que cuando te dicen repetidamente esto me lastima y esto me gustaría, se hace lo mayor posible para cambiarlo o modificarlo, y eso solo pasaba si me ponía loca (por así decirlo) y reclamaba para volver a caer y quedarme. 

Han sido varias ocasiones en las que me he cuestionado por que he soportado y me di cuenta que realmente te amaba, que me gustaba la conexión que había y podíamos hablar de todo y de nada, por tus enseñanzas, siempre tenías una palabra buena que decirme y sobre todo me enseñaste a valorarme.

Pero también me di cuenta que no siempre estarías, que sus ausencias y silencios me dolían, me hacían cuestionarme todo; siempre entendí que no eras como los demás pero me detonabas esa incertidumbre que otros hicieron. 

Por más trabajo consiente que haga en todo, me hacía a un lado para dejarte por encima, justificaba todo y comprendía a tal punto que me sentía ridícula siento tan empática con tu ausencia; por que en mi cabeza no hay un hombre que me quiera como tú pero sabes creo que si lo hay alguien que este dispuesto a recorrer el mundo por mi y estar a mi lado, alguien que si responda mis mensajes y no tenga que esperar un mes a que me devuelva una llamada. 

Aún no sé si quiero que me llames o me busques, aún no encuentro en que lugar ponerte por que fuiste sumamente especial en mi vida, ni siquiera sé si quisiera volverte a ver, no tengo idea de como reaccionaría y no tengo ni ganas ni fuerza para hacer una mala cara o estar a la defensiva. 

Te extraño demasiado, es horrible el hueco que has dejado pero te lo dije la última vez "la siguiente me iré sin hacer ruido, por que me amo más a mi" y no tengo ni puta idea de donde embono en tu vida.

Han pasado tantas cosas y tanta incertidumbre y es tan raro no contarte, pero estaba cansada de hablar con la pared, esperar respuestas y que el trabajo sea más importante que una persona que te quiere; me quedaré con muchas canciones por dedicarte y atesoraré todo lo tuyo en mi corazón y si un día pierdo la memoria espero que tus recuerdos prevalezcan.

Te dejo ir, no por que quiera pero si sigo con cierta esperanza no lograré que nadie entre y realmente creo que valgo la pena. 

¡Gracias por todo! De corazón deseo que seas muy feliz, realmente creo que mereces la pena; pocas veces he cerrado los ojos y veía que contigo podía hacerme viejita, espero que pronto encuentres a alguien que te vea con esos mismos ojos con los que te vi.